viernes, 13 de abril de 2012

Perdoné errores casi imperdonables. Intenté sustituir personas insustituibles y olvidar personas inolvidables. Me decepcioné de personas que pensé nunca me decepcionarían. Sonreí cuando no podía. Hice amigos eternos. Lloré oyendo música y viendo fotos. Llamé solo para escuchar una voz... Pensé que me moría de tanta tristeza.Tuve miedo de perder a alguien especial... Pero sobreviví. Aprendí que a veces el que arriesga no pierde nada, y que perdiendo también se gana.



2 sonrisa(s).:

G.Woldorf ! dijo...

Toda la razón,me gusta mucho tu blog :)

Francis dijo...

Es una mierda, la verdad. Pasar por traumas sentimentales es una verdadera patada en las bolas que te deja un dolor terrible de cabeza durante mucho tiempo. Tómatelo con calma. ¿Con optimismo? No, por supuesto que no. Te has ganado tu derecho a sufrir tranquila y todos necesitamos tiempo de duelo, así que, no te preocupes porque no he venido a decirte que no pierdas la fe en la gente (aunque dudo que te importe mucho lo que te pueda decir alguien a quien no conoces).

Dice una canción "El tiempo no cura nada. El tiempo no es un doctor" y tiene toda la razón, porque el dolor va a ser el mismo y las ganas de matar también, tengas la edad que tengas. ¿He venido a darte una palabra de ánimo? No. ¿La necesitas? Les pueden dar por el culo. Cada uno tenemos bastante con nuestras cosas.

Lo que quiero decir con la parrafada es que, aunque tengas todas las ganas del mundo, no sucumbas a tu lado misántropo, que de ahí se tarda en salir. Te lo dice el autor del blog del resentimiento "Las alas de la mariposa" durante varios años.

Tómatelo con calma ya haz algunas fotos de Badajoz (si sigues por ahí) y me las mandas, que lo echo de menos.

À bientôt ! Y no seas una extraña .

Publicar un comentario